El 26 de septiembre se celebra el día de San Cosme y San Damián, patrón de médicos y farmacéuticos
Vida y Milagros de San Cosme y San Damián
San Cosme y San Damián fueron personajes ilustres de los primeros tiempos del catolicismo que realizaron gran cantidad de actos benéficos y bondadosos. Ya que eran médicos, se les considera patrones de los niños, de los cirujanos, de los trabajadores de los balnearios, de los médicos, y de los farmacéuticos.
Son santos muy celebrados por todo el mundo, y prueba de esto es la gran iglesia que fue erigida en su nombre en Constantinopla, y más adelante, la basílica que fue creada en el foro romano por el Papa Félix IV (526-530). El día oficial de la celebración de San Cosme y San Damián fue movido del 27 al 26 de septiembre para evitar colisión con la celebración de San Vicente de Paul.
Milagros
Cuando se nombra tanto a San Damián como a su hermano San Cosme, se habla de curaciones milagrosas, que no poseen mayor explicación científica. De hecho, a estos hermanos se les atribuye la sanación de uno de los emperadores romanos más recordados de la historia: Justiniano I.
Luego de su expansión y aceptación en todo el cristianismo como santos, San Damián ha sido centro de grandes milagros y curaciones alrededor de todo el mundo, según los testimonios de las personas que le han pedido ayuda con gran fervor, y este les ha respondido de forma diligente.
Según se dice, dentro de los milagros que en vida fue capaz de realizar junto con su hermano, se encuentra el trasplante de una pierna, lo que hace más de 1500 años era en realidad un milagro. La operación trataba de reemplazar la pierna de un enfermo por la de un sirviente que había fallecido recientemente.
Luego de su fallecimiento, existen noticias sobre la forma en la que estos influyen sobre las personas mediante apariciones en sueños, y que quienes les ven son aquellos que han clamado por ayuda y han sido escuchados, a tal punto de ser sanados después de dichos episodios nocturnos.
Penurias de vida
Tanto San Damián como su hermano rehusaban realizar cualquier tipo de cobro a los enfermos que atendían, realizando su trabajo médico estrictamente por vocación. Sin embargo, su gran bondad no evitó que fueran apresados en Cilicia, lugar del cual se dice que son originarios, por orden de Lisias junto con el beneplácito del emperador Diocleciano.
Dicho acto tuvo lugar en el año 300 d.C., y luego de ser apresados comenzaron una serie de torturas hacia ellos, que sin embargo, aunque muy intensas, no les llevaron a la muerte, según se dice, gracias a la intervención divina. Por lo que sus captores decidieron eliminar su buena suerte de raíz, decapitando a San Cosme y San Damián.
Según la tradición hablada, las torturas que los hermanos debieron soportar fueron: ser arrojados al mar para ahogarse, colocarse en frente de un pelotón de arqueros y ser objetivos de diversos disparos, y por último, fueron enviados a la hoguera, eventos a los cuales sobrevivieron por gracia divina.
Lugar de entierro
Después de su muerte, San Damián fue enterrado junto con San Cosme en la ciudad de Ciro, ubicada en Siria, lugar que llegó a convertirse en la sede principal de la adoración a los hermanos, hasta que la misma fue llevada a Roma y después a todo el mundo con diversos monumentos erigidos en el honor de los hermanos.
De hecho, se dice que la primera iglesia que fue realizada en su honor, que se encuentra en Ciro, marca el lugar donde fueron enterrados los dos hermanos y mantiene su referencia como lugar milagroso, siendo destino de devotos que suplican la cura de alguna enfermedad.
La espada
Se dice que tanto San Cosme como San Damián fueron decapitados con una espada, específicamente el gladius romano, muy popular en dicha época. Esta espada era utilizada por el ejército para el combate cuerpo a cuerpo, aunque tenía una gran cantidad de propósitos, entre los que se encontraba la ejecución de prisioneros.
En el año 914 del tiempo presente, se realizó la entrega de una espada adornada con hermosos detalles en representación de la que convirtió a los dos hermanos en mártires. Se encuentra expuesta actualmente en la cámara del tesoro de la catedral de Essen, en Alemania. La espada está bañada en oro y se exhibe dentro de su funda.
La espada ha sido utilizada como pieza ceremonial en diversos eventos, sobre todo en la antigüedad, y con el paso del tiempo se le agregaron algunos detalles para engrandecer su belleza. La espada no ha sido utilizada como objeto en actos públicos desde el año 1626.
Cruz de San Damián
Es un crucifijo de madera, datado en el siglo VII y delicadamente tallado, dentro del cual no solo se encuentra la figura de Jesucristo, sino que también se ve a la Virgen María y a María Magdalena, así como a diversos ángeles que rodean a cristo en la cruz.
Es una cruz latina hecha de madera de nogal que se utilizó como lienzo para retratar a Jesucristo con el rostro elevado al cielo. El fondo es oscuro para poder resaltar los detalles, mientras que los bordes son de madera desnuda. Se desconoce la autoría de la obra.
Todos y cada uno de los que se pueden observar dentro de la pintura habían formado parte de la vida de Jesucristo, aparte de su madre y de quien se cree que fue su esposa, se pueden observar algunos apóstoles. En ella, solo dos personas no portan los halos celestiales sobre sus cabezas.
En la parte superior de la cruz se puede observar cómo fue la entrada al cielo por parte del hijo de Dios, llegando envuelto en un círculo como una cápsula y siendo recibido por diez ángeles, obteniendo la bendición de su padre celestial por el sacrificio que había realizado.
La localización actual del crucifijo, único en su especie, es la basílica de Santa Clara en la ciudad de Asís en Italia, sede designada como lugar de protección y exhibición de tan preciado elemento de la cristiandad antigua y moderna.
Significado de la Cruz de San Damián
Dentro de la cruz se pueden apreciar una gran cantidad de símbolos, por lo que asignarle un solo significado puede llegar a ser erróneo, sin embargo, se le conoce como la cruz empleada por los franciscanos para representar una vida religiosa y devota, austera y alejada de los excesos y placeres terrenales.
Esta cruz representa la humildad y el trabajo directo con los más necesitados, la compasión y el esparcimiento de la palabra del señor a donde quiera que se acude. Se le considera como un símbolo franciscano gracias a San Francisco de Asís, quien se dice que recibió un mensaje de la cruz cuando se encontraba rezando en la iglesia de San Damián.
Curiosidades de San Damián
El nombre significa directamente “domador”, por lo que se entiende del mismo una personalidad fuerte, aunque prudente.
Del nombre se han realizado diversas versiones, según sea el idioma del cual se esté tratando, y de si el nombre es “compatible” con el dialecto. Se le puede reconocer a San Damián si se escucha hablar sobre “Damianu”, “Damianus”, “Damian”, o “Damijonas”.
Una gran cantidad de personajes históricos y famosos han sido Damián. También lo fue un padre católico convertido en Santo, San Damián de Molokai, al que se le atribuyen milagros tanto en vida como después de su muerte.
Se sabe que han surgido diversas órdenes y organizaciones que emplean a San Cosme y San Damián como sus patronos. Tratan sobre las especialidades que se les ha otorgado a estos santos, y se les honra ejerciendo la profesión de manera excelsa y participando en las actividades religiosas dedicadas a dichos santos en cada lugar.
San Cosme y San Damián realizaban sus actos de curación durante el sueño de los enfermos, por lo que se les considera milagrosos. No solo eliminaban los males de las personas, además lo hacían con gran discreción y sin dolor alguno para el paciente.